En aras de la comunicación, todo lo que existe en el mundo recibe un nombre (con el que se nos identifica), por lo que debemos cuidarlo.
En cada situación que vivimos, nos encontramos con marcas. Cuando una persona va a buscar un producto, en realidad busca la marca que ya conoce, y es a partir de esta marca cuando empiezan las comparaciones de precio, tamaño y calidad.
No importa el tamaño de su empresa. Invierta en la marca. Un día valdrá más que tu empresa.
Las marcas pueden ser de:
Producto: El utilizado para distinguir un producto idéntico, similar o afín de origen diverso. Ejemplo: Coca-Cola (refresco), Veja (revista), Omo (detergente);
Servicio: se utiliza para distinguir servicios idénticos, similares o afines de origen diverso. Ejemplo: Embratel (telefonía fija), Varig (aerolínea), Bradesco (servicios financieros);
Colectivo: El utilizado para identificar productos y servicios procedentes de miembros de una determinada entidad;
Certificación: La que se utiliza para certificar la conformidad de un producto o servicio con determinadas normas o especificaciones técnicas, especialmente en lo que se refiere a calidad, naturaleza, material utilizado y metodología empleada.
Se presentan en la siguiente modalidad:
Nominativo: Es aquella una o más palabras en el sentido amplio del alfabeto romano, incluyendo también neologismos y combinaciones de letras o números romanos y arábigos;
Mixta: Es la constituida por la combinación de elementos nominativos y figurativos o de elementos nominativos, cuya grafía se presenta de forma estilizada;
Figurativo: Figurativo se compone de dibujo, figura o cualquier forma estilizada de letra y número, por separado;
Tridimensional: Es la constituida por la forma plástica del producto o del envase, cuya forma tiene capacidad distintiva en sí misma y está desvinculada de cualquier efecto técnico.